Hay que hacer un raconto de las cosas que estamos en contra y de las que estamos a favor. Siempre es bueno saber contra qué escribimos, vivimos y pensamos. La mayoría de las razones son estúpidas. No se alarmen, somos lo que comemos y los que pensamos. Y acá lo tenemos bien asumido.
-Contra el generar una estructura violenta en el mal sentido, no en cuanto a por ejemplo una posición filósofica schmittiana de entender la violencia como conflicto sino en el sentido literal de violencia y abuso hacia el otro verbal y físicamente. Y contra todos los consensos generados a partir de este método.
-Contra la hipocresía del que se mira al espejo para ser más croto.
-Contra la hipocresía del que por usar camisa o chomba se te cree superior.
-Contra la violencia de género.
-Contra el ecologismo extremo que prefiere un arbol a un hombre.
-Contra el pappismo y/o larenguismo, que suponen que el rock es solo lo que hizo Pappo o La Renga.
-Contra el honestismo irresponsable y su antagonista la corrupción.
-Contra la ingenuidad que se permiten intelectuales y gente de estudio que no se debería permitir a si mismo.
-Contra la obsecuencia, los aduladores y los buchones de turno.
-Contra el obrerismo resentido que cree que solo usando grafa y levantando cosas pesadas se trabaja.
-Contra el oficinismo que se supone implicita o expliciamente superior por no ir de grafa a trabajar (similar el punto que habla de la chomba,etc)
-Contra el intelectualismo que supone la vieja vida contemplativa de Aristóteles como la única felicidad posible.
-Contra la moralización innecesaria o hipócrita (políticamente, ejemplo concreto: Israel)
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